Carlos, un estudiante español, viaja a África en busca de Souli, un reconocido escritor que en busca de anonimato ha decidido aislarse del mundo en un poblado de pescadores. Soulí posee un cuento ancestral que Carlos espera transcribir. Mezclándose con la comunidad termina convirtiéndose, sin saberlo, en el instrumento de venganza entre la gente que se va cruzando: Yann, un comerciante de langostas, Mona, una mujer francesa que dirige un taller de artesanía, y Abi, una joven africana que sueña con descubrir Europa. De su aparente inocencia partirá la ruptura del equilibrio social y la armonía «establecida» en el pueblo.